Nadie quiere tener cargos por manejar ebrio en su registro penal, porque vienen con consecuencias que pueden limitar sus opciones en la vida. Pero no todos los cargos penales por manejar ebrio son iguales. La severidad de las consecuencias depende de las circunstancias del arresto. Cada conductor en Florida debería saber los factores que pueden agravar las penalidades por una condena por manejar ebrio.
Cargos subsiguientes
Cada vez que una persona recibe una condena por manejar ebrio, las consecuencias aumentan drásticamente (enlace en inglés). Por ejemplo, la cuarta condena cuenta como un delito mayor del tercer grado, con consecuencias devastadoras que pueden incluir miles de dólares en multas y años en la prisión.
Cantidades mayores de alcohol
Manejar con un nivel de alcohol en la sangre de 0.08% o más es ilegal, y puede conducir a cargos por manejar ebrio. Pero si la cantidad de alcohol en su sangre en el momento de su arresto es mucho mayor al límite legal (por ejemplo, 0.16%), las penalidades pueden aumentar aún si es su primera condena.
Tener a un menor en el auto
Si hay un pasajero que tiene menos de 18 años de edad en el auto cuando la policía lo para a usted, podría haber consecuencias adicionales agregadas a las penalidades por manejar ebrio.
Negarse de tomar la prueba de alcoholímetro
Florida es un estado de consentimiento implícito, en que cualquier persona que conduce en las calles públicas del estado da su consentimiento a tomar una prueba de alcoholímetro cuando la policía se lo pida (enlace en inglés). Esto significa que, si usted se niega a tomar una de estas pruebas cuando la policía lo pide, podría tener consecuencias legales, como la pérdida temporal de su licencia de conducir.
Si la policía para a usted en la calle y le acusa de manejar ebrio, usted debería colaborar con la policía. No se niegue a tomar la prueba de alcoholímetro, y no resista el arresto, pero tampoco debería decir nada que puede ser usado contra de usted en la corte. Es mejor invocar su derecho a tener un abogado, y luego no decirle nada a la policía hasta que tenga su abogado a su lado para guiarle.
